Los japoneses comen muy poca grasa y sufren menos infartos que los británicos o los estadounidenses.
Los franceses comen mucha grasa y también sufren menos infartos que los británicos o los estadounidenses.
Los españoles beben muy poco vino tinto y sufren menos infartos que los británicos o los estadounidenses.
Los italianos beben demasiado vino tinto y también sufren menos infartos que los británicos o los estadounidenses.
Los alemanes beben mucha cerveza y comen muchas salchichas y grasas y sufren menos infartos que los británicos o los estadounidenses.
Conclusión: Come y bebe lo que quieras.
Por lo visto, hablar inglés es lo que te mata.