El pequeño Johnny pidió una bicicleta para su cumpleaños.
Su padre le dijo: “Te regalaríamos una, pero nuestra hipoteca es de 80.000 dólares y tu madre ha perdido el trabajo”.
Al día siguiente, el pequeño Johnny salió con la maleta hecha y su padre le preguntó:
“¿A dónde vas, hijo?”
El pequeño Johnny respondió: “Anoche pasé por delante de tu habitación y oí que le decías a mamá que te ibas, luego oí que mamá te decía que esperaras porque ella también iba a venir, ¡no me voy a quedar aquí solo con una hipoteca de 80.000 dólares y sin una puta moto!”